Capitulo 93

Hello Girls! Aqui les traigo el capitulo 93 les quiero comentar que voy a seguir con la nove hasta el final tenga o no tenga comentarios, simplemente por que no me gusta dejar las cosas a la mitad, solo espero que mis antiguas lectoras regresen y sigan comentando, les mando un beso enorme y para el capitulo de hoy "WISH YOU WERE HERE" de Avril Lavigne

¿¿??: Bienvenida a casa Mía –se escucho al unísono

Encendieron las luces y ahí estaban todos mis amigos y unos cuantos vecinos, me pareció extraño ver a Nick con ellos

Yo: gracias chicos, no me lo esperaba

Vicky: no podía faltar una calurosa bienvenida ¿o si? –dijo acercándose a mi y entregándome un ramo de flores que se unió al de Liz, era tan enorme que lo cargue con dificultad

Yo: no se hubieran molestado chicos

Charlie: yo te ayudo Mía –repuso quitándome las flores de las manos

Los chicos se fueron acercando y me abrazaron dándome buenos deseos y pronta recuperación, todos lo hicieron excepto Nick

Yo: ¿y tú, no me abrazas Nicholas?  -el me miro sorprendido

Nick: Mía… yo… quiero decirte que…

Yo: anda cállate y dame un abrazo –se acerco lentamente a mi y y me abrazo fuerte

Nick: Mía yo… lo siento mucho, perdóname por todo lo que hice, pero yo estaba ciego de celos y ahora que estuve a punto de perderte, me invadió el remordimiento, solo espero que me perdones por todas las cosas horribles que te hice

Yo: ¿cosas horribles? No se de que hablas Nicholas

Nick: gracias Mía

Emma: buena Nick ya déjala en paz y mejor pasemos al comedor

Pasamos al comedor las chicas hicieron lasaña mi comida favorita, pero por mas que les rogué ni siquiera me dieron un solo bocado todos me dijeron “el doctor dijo que solo te diéramos cosas nutritivas, así te recuperaras mas rápido”

Yo: son muy malos ¿Cómo es que hacen una fiesta en mi honor, además hacen mi comida favorita y no puedo ni siquiera olerla?

Daniel: lo sentimos Mía, solo seguimos ordenes

Yo: jajaja, pues no es justo, insisto son muy malos conmigo

Charlie: lo hacen por tu bien Mía

Después de que terminamos de “comer” sacaron un cheese cake con salsa de frutas rojas que era mi postre favorito, pero como era de esperarse a mi solo me toco… gelatina en su lugar, por que para mi desgracia tampoco podía comer mi postre favorito, algo totalmente injusto. Tiempo después volvimos a la sala y ahí estuvimos un rato mas hasta que anocheció, por algún motivo no quería que eso pasara.

Emma: chisco se que estamos muy a gusto con la compañía de Mía, pero es hora de que nos vayamos, esta chiquilla lleva todo el dia sin descansar

Yo: no se vallan… yo estoy bien

Emma: el doctor recomendó absoluto reposo

Yo: pero estoy bien

Emma: Mía escucha estuve chocando tu caso vi en Internet, que aunque físicamente te sientas bien, todo puede complicarse ok, así que chicos tenemos que irnos

Vicky: no quiero quedarme un rato más

Daniel: yo también

Emma: les he dicho que no podemos y nos iremos

Nick: como digas doctora –dijo con sarcasmo

Emma: futura doctora –repuso con autoridad- Y aunque te burles Nicholas

Yo: Emma yo de verdad estoy bien

Emma: Mía entiende que tienes que descansar, mañana iremos a Harvard, iremos a checar cuando comienzan los cursos de inducción

Yo: esta bien váyanse y déjenme sola como un hongo

Vicky: volveremos muy pronto además Jaslene se queda aquí –me abrazo- Que te mejores

Yo: gracias Vicky

Jaslene: bueno no nos vamos, nos llevan –me abrazo

André: so nos llevan, odio cuando se pone en plan autoritario –dijo refiriéndose a Emma

Yo: si, lo se es estresante

André: si muy estresante, cuídate mucho Mía

Yo: claro gracias André 

Edward: hablaron Kevin y Lili están muy contentos de que estés bien, te mandaron los mejores deseos

Yo: muchas gracias, les marcare en cuanto recupere mi cel

Nick: Mía, creo que tenemos una platica pendiente

Yo: si, yo también lo creo

Nick: te llamare luego

Yo: si estaré esperando tu llamada

Nick: me alegro que estés bien –me abrazo y beso mi mejilla

Fui hasta la puerta con ellos y los despedí, cerré la puerta después de que ellos se fueron, estaba nerviosa y mi cuerpo temblaba ligeramente

Liz: ¿Cómo te sientes Mía?

Yo: mmm… bien Liz gracias –presentía que después de ese dia, esa pregunta la iba a escuchar muy a menudo

Liz: me alegro que estés de vuelta en casa –me abrazo

Yo: gracias

Charlie: tus cosas están en su habitación, Liz las acomodo para ti

Yo: muchas gracias Liz, no te hubieras molestado

Liz: no fue molestia Mía

Yo: yo… estoy cansada, voy a dormir

Charlie: descansa Mía

Yo: igual ustedes

Subí lentamente las escaleras, mis piernas temblaban, mi corazón latía de forma desigual y tenia un tremendo nudo en la garganta, ahora sabia a lo que le tenia miedo horas antes, le tenia miedo a los recuerdos, ahora que la casa estaba prácticamente sola, solamente se venia una sola persona a mi mente, llegue a la planta alta y camine directo a la puerta de mi cuarto, tome la perilla la gire muy lentamente, pero cometí el error de voltear hacia atrás y ahí estaba en antiguo cuarto de Joe, mi corazón latió rápidamente con la absurda idea de que el tal vez podría estar ahí, sabia que eso era prácticamente imposible, pero aun así fui hasta la puerta, dudando coloque mi mano en la perilla y lentamente la gire para abrirla con un débil movimiento, di un paso adelante y me adentre lentamente a la habitación, mi corazón casi se salía de mi pecho y mis ojos se llenaron de lagrimas, las contuve mientras echaba un vistazo al lugar, todo estaba como lo habíamos dejado  meses atrás, mire detenidamente cada rincon y todo estaba en absoluto silencio “no esta aquí” me dije a mi misma, pase mi mirada a la ventana y ahí estaba un chico corpulento, alto que muy apenas se distinguía… Es el.

Yo: Joe… es Joe… -mis ojos soltaron unas cuantas lagrimas contenidas- Es el… Es Joe --el pareció escuchar mi llamado y se giro hacia mi

Joe: Mía… por fin llegaste –me dijo con una hermosa sonrisa dibujada en sus labios

Yo: Joe… estas aquí

Joe: y donde más podría estar si no es a tu lado

Yo: creí que te habías ido sin despedirte de mí

Joe: eso jamás, te he dicho mil veces que no me iré nunca a menos que tu me lo pidas

Yo: en ese caso, prepárate para aguantarme toda la vida, te pediré que me dejes

Joe: más te vale

Me hizo una seña para que me acercara a el, camine muy lentamente con el miedo de que se disolviera en el aire, cuando llegue a donde el estaba quise tomar su mano pero el desapareció sin dejar un solo rastro, NO, el esta aquí me di media vuelta y volví a mirar a la habitación y estaba completamente sola, tratando de no ver la realidad me dirigí al armario y estaba vació, solo lo ocupaba una fotografía de su equipo de fútbol, la tome entre mis manos y me deje caer bruscamente sobre mis rodillas, de mis ojos comenzaron a brotar millones de lagrimas, mi corazón parecía tener un enorme hoyo justo en el centro y mi cabeza daba vueltas como un carrusel pero en exceso de velocidad, solo podía en concentrarme en mirar la fotografía, mas bien solo observaba a una sola persona en ella

Yo: ¿Por qué te fuiste? ¿Por qué? –pregunte esperando una respuesta de la fotografía, para poder mitigar el inmenso dolor que sentía en mi pecho