Hola chicas ¿Como estan? yo estoy mmm... no se me siento rara y esta haciendo mucho frio en la mayor parte de México, creanme que cuando digo MUCHO es un buen, pero aqui estoy al pie del cañon subiendoles un nuevo capi que creanme es crucial en la nueva etapa de la novela espero les guste, por cierto Angie muchisimas gracias por comentar nena te extrañe, este capitulo va dedicado especialmente para ti espero te guste, otra cosa les quiero pedir un favor me ayudarian a conseguir mas lectoras, necesito mas comentarios para conseguir mas inspiracion por fa, y si eso pasa les prometo que les subire un maraton, no se de cuantos capitulos pero les van a encantar y para el capitulo de hoy una cancion buenisima "PROMETISTE" de Pepe Aguilar, no es la musica que estan acostumbradas a que seleccione para los caps pero esta en particular me encanta, es bellisima disfruten el cap y no se olviden de comentar un beso enorme.
Narra Mía
Me quede en shock después de recibir la
llamada de Joe, mi primer impulso fue llorar y después salir corriendo.
Liz: Mía… a donde vas… encontré los
recetarios… Mía…-escuche que Liz me grito cuando Sali corriendo
¿Por qué no respondió ninguna de mis
preguntas? Mi corazón se rompió en 1000 pedazos, aborde mi auto y conduje sin
rumbo por varios minutos, cuando reaccione estaba afuera del departamento donde
vivía con Joe, seque las lagrimas con mis dedos, abrí la portezuela del auto y
baje para entrar al edificio, inhale aire para poder tranquilizarme, camine y
subí todas las escaleras a paso firme, pero toda la fortaleza que había conseguido
se derrumbo cuando estuve frente a la puerta de mi exhogar, mis ojos se
volvieron a llenar de lagrimas mi corazón latía rápidamente y tenia
sentimientos encontrados, me arme de valor tome la llave y abrí la puerta, en
menos de lo que imagine estaba en la sala, a mi mente volvieron dolorosos
recuerdos, momentos que viví con Joseph inundaron mi mente, se escucho el
fuerte sonido de mis rodillas cuando chocaron contra el piso, mis manos se
posaron sobre la alfombra, estaba dolida, confundida, decepcionada, todo mi
cuerpo dolía, mis ojos derramaban muchísimas lagrimas, los latidos de mi
corazón habían disminuido considerablemente
Yo: Joe… -dije en un susurro-. Joe… ¿Por que me dejaste?... ¿Porque lo hiciste?... si yo te amo... te necesito
De pronto mi estado de ánimo cambio y toda la
tristeza se transformo en rabia y odio, todo en ese estupido departamento me
recordaba a Joe no había un solo rincon en el que no viera su rostro
Yo: eres un tonto Joe… te odio –grite
enfurecida-. Te odio, eres lo peor que me ha pasado en la vida, no mereces una
sola de mis lagrimas… TE ODIO
A pesar de que toda mi ira estaba fluyendo
sentía que me quemaba por dentro, me levante rápidamente y fui hasta donde
estaba un jarrón y lo arroje sobre la pared y se hizo añicos, ese jarrón tenia
un gemelo, lo tome entre mis manos y lo estrelle en el suelo.
Yo: te odio Joseph… te odio
Fui con el comedor y arroje la mesa que era de
cristal, hizo un gran estruendo cuando el cristal toco el piso, lo único que
quería era destruir ese departamento no quería ver a Joseph en ningún lado, así
que fui a la cocina por un cuchillo y comencé a destruir los sillones, los
corte y les saque el relleno hasta dejarlos vacíos, la pantalla que adornaba la
sala también termino estrellada en el suelo, fui a la habitación y tome una de
las pantallas que estaban en las mesitas de noche y la arroje contra el tocador
estrellándose en el espejo, regrese a la cocina y destruí todo a mi paso, la
cafetera, el microondas, la licuadora, el horno electricoetc… recordé que
Joseph guardaba un par de pinturas en aerosol en el baño fui por ellas, las
agite y pinte en la habitación con letras enormes la frase “TE ODIO” Salí de
ahí y regrese a la sala y escribí la misma frase “COBARDE” me volví a lanzar
sobre mis rodillas, ahora ya me encontraba un poco mas tranquila, ahora si todo
lo que alguna vez tuve se había esfumado, mi castillo se había derrumbado y
junto con el todo mi mundo, no tenia una sola razón por la cual seguir adelante
Yo: Joe… Joe… ¿Por qué dejaste de amarme?
¿Acaso todo fue una mentira? Yo tenia la certeza de que mi sitio era a tu lado,
pero a ti se te olvido que prometiste que nunca me dejarías, que sin mi no
había razón para seguir viviendo, se te olvido que prometiste amarme hasta el
fin del tiempo, que en las buenas y en las malas me darías tu calor, se te
olvido que me robaste el corazón
El departamento había cambiado por completo en
cuestión de minutos todo lo que con mucho esfuerzo construimos se derrumbo en
segundos, ahora estaba completamente destruido, tal como se encontraba mi vida
en esos momentos, no podía pensar en nada, solo trataba de asimilar que Joe no
me quería como parte de su vida, me quede ahí sentada con las piernas sobre mi
pecho y abrazándolas con mis brazos, mis ojos derramaban lagrimas por montón
Un mes después
Toda la ilusión en mi vida se había esfumado,
había olvidado lo que la palabra alegría significaba, no quedaba nada de la Mía que mis amigos conocían.
Un sábado por la tarde las chicas estaban de
visita en mi casa como lo hacían cada fin de semana, los chicos se habían ido a
un partido de basket ball, nosotras tendríamos una tarde de compras, después
iríamos al cine, pero estábamos en mi casa ya que yo puse el pretexto de no ir
por que me dolía la cabeza, ellas se quedaron para hacerme compañía, estábamos
en absoluto silencio Victoria estaba sentada en mi tocador arreglándose el
cabello, Jaslene en la cama pintándose las uñas de los pies y Emma caminaba de
un lado a otro como un león enjaulado, yo me encontraba sentada junto a la
ventana mirando al patio, sin prestar atención a nada ni a nadie
Emma: ya basta –grito sacando a todas de sus
respectivas ocupaciones, incluso a mí-. Ya estoy harta
Jaslene: ¿Qué ocurre Emma?
Emma: ya me canse, estoy fastidiada
Victoria: de que
Emma: creo que alguien tiene que hablar y esa
soy yo –Jaslene y Victoria la miraron como si no la entendieran-. Ya me
fastidie… Mía… no me gusta que todo el tiempo estés así, me desespera
Yo: ¿Cómo? –pregunte consternada
Emma: tienes que hacer un esfuerzo por
recuperar tu vida, por salir adelante
Yo: ¿A que te refieres?
Emma: sabes muy bien a que me refiero, estoy
cansada de que cada fin de semana hagas exactamente lo mismo
Yo: no se de que hablas
Emma: solo mírate, pareces un zombie has
perdido muchos kilos, tienes unas ojeras terribles y hasta has perdido el
bronceado de tu piel, crees que no me doy cuenta de que todo el tiempo te la
pasas llorando, no crees que ya paso mucho tiempo, tienes que seguir adelante,
luchar por tus sueños
Yo: ¿Sueños? Yo no tengo sueños, no tengo nada
Emma: ¿No tienes nada? Y ¿Nosotros? No somos
nada para ti por si no te has dado cuenta nos preocupas y mucho, nos duele ver
en lo que te has convertido, yo en especial quiero devuelta a mi mejor amiga, a la que me hacia reír, a
la que le confiaba mis secretos, a la que le pedía consejos, a la que siempre
me escuchaba y creo que no solo hablo por mi ¿Cierto chicas? –ambas
asintieron-. Mía por favor reacciona tienes un futuro por delante, se que lo
que paso con el te puso muy mal, pero no es el final, hay muchos chicos que
matarían por estar con alguien como tu, ¿Qué paso con tus planes de ir a la
universidad? Se que todavía están ahí, aun es tiempo de que ingreses, ya
investigue y hay una oportunidad de que recuperes este semestre solo tienes que
estudiar de lunes a domingo, para que te pongas al corriente y puedas venir
conmigo, por favor prométeme que lo vas a pensar, además conocerás muchos
chicos guapos.
Emma tenia mucha razón, tenia que recuperar mi
vida, tenia que vivir por mi, tenia que salir de ahí para olvidar aunque me
costara mucho trabajo, pero debía intentarlo, por otro lado no quería dejar mi
casa ahí por lo menos veía a Joe en mis recuerdos, sus imágenes volvían a mi a
cada instante, pensaba en el todo el dia, pero… ¿El pensaba en mi?
Emma: por favor Mía di que si
Yo: mm… dijiste que conoceré chicos guapos
–interrogue dibujando una picara sonrisa en mis labios
Emma: entonces eso es un ¿Si?
Yo: si… voy a la universidad contigo
Emma: genial Mía esta de regreso –me abrazo